En algunas ocasiones ya he hablado de la figura de los
guías de atletismo para ciegos totales. Siempre he intentado dar una visión
desde el punto de vista tanto deportivo como del ser humano a este respecto.
Este fin de semana mis actuales guías, Antonio Vicente
Criado y David Magán, Anvi y el Coleta para los amigos, iban a saber en qué
consiste la figura del guía.
Para los que no lo sepáis, la cuestión no se basa sólo
en entrenar algún día de la semana o asistir a una carrera un dominguete.
La cosa va más allá cuando se trata de dejar tu casa y a tu familia durante
todo un fin de semana y dedicarte en exclusiva a, en este caso, mi persona.
Me cuesta encontrar guías con la calidad que necesito,
pero aún más me cuesta encontrarlos con ese espíritu altruista que la figura
representa. Anvi y David representan todos estos valores. Así me lo han
demostrado en este viaje. Tenían algo a su favor y es que uno es urdeño y otro
pueblano y esto ya es un rasgo de su categoría y valor.
Sí amigos, pues hay que tener mucho valor y decisión
para llevar corriendo atado con una cuerda jamonera a un ciego, por un circuito
lleno de grietas, baches, badenes, con la gente que se cruza porque no saben
que no ves…
De este viaje podría destacar mil y una anécdotas y no
sé si sabría plasmar la esencia de lo que realmente queda. Estas líneas no son
la crónica de una carrera, como me han pedido mis amigos, son la crónica de dos
fantásticos atletas y mejores personas.
Una semana bastante mala para mí en la que tenía que
volver a competir. Una vez más preparándome la maleta, una vez más saliendo de
viaje hacia la competición, una vez más poniendo en marcha el chip competitivo:
no hay dolor, todo está bien, vamos a disfrutar y a darlo todo. Esas son
algunas de las consignas que debes poner en práctica, estés o no
lesionado, con catarro o con una mala situación circunstancial, es decir,
positivo al cien por cien.
Así salí de Talavera con la buena compañía de mi padre
hacia La Puebla de Montalbán, en busca de mis dos amigos. Al llegar, un buen
café nos hizo compartir unos maravillosos minutos para que mi padre conociese a
estos fenómenos. Pronto nos dispusimos para ir en busca de la ayuda inestimable
de mi amiga Yolanda y así partimos de tierras toledanas en busca de la Media Maratón
de Ciudad Real. Llegamos al fantástico hotel que nos ofreció la
organización y fuimos a estirar las piernas, coger el dorsal y ver algo
del circuito. Pronto, Anvi se percató de los problemas que íbamos a tene:
calles muy estrechas, badenes agrietados y un recorrido que transitaba
zigzagueando por las calles de la ciudad en su mayor parte. Bueno, no pasa
nada, hemos venido a reventar y lo vamos a hacer.
Después de la cena, tuvimos tiempo de reírnos y charlar
tirados en sendos colchones mientras al fondo la tele- tonta hablaba de qué sé yo.
Preparamos las mochilas y decidimos que el kilómetro y medio que había hasta la
salida lo haríamos de calentamiento y así saldríamos directamente cambiados
desde el hotel.
Eran las 4 de la mañana y el sueño profundo del que
gozaba se vio interrumpido por la necesidad imperiosa provocada por la
excesiva hidratación. Solucionado el percance e intentando hacer el
mínimo ruido posible para no despertar a mis amigos, me dispuse de nuevo a
entregarme a los brazos de Morfeo. A la mañana siguiente el bueno de David, me
comenta que si oyó mi paseo nocturno y nos sirvió para las primeras risas
del día.
Tenemos tiempo y desayunamos tranquilamente, yo
unas buenas tostadas con aceite y mermelada, Anvi con su zumito, plátano y
demás viandas y el gran David cuidándose como siempre, napolitana de
chocolate y croissant gigante.
Con los deberes hechos, como manda la tradición, nos
cambiamos y salimos hacia la salida de la carrera. El día no es tan frío como
lo pintaban, el ambiente y los corredores van poblando las calles de esta
bonita localidad manchega.
Nos colocamos en la primera fila para el pistoletazo
de salida después de unas progresiones y de ver que efectivamente el terreno no
era lo ideal para nosotros.
La primera mitad del recorrido la hice con Anvi y
aunque intentábamos ir sobre 3:50 el km, cada vez que se estrechaba la carretera
y venían las dificultades perdíamos unos segundos maravillosos.
Hasta el kilómetro 10 íbamos sobre el tiempo previsto, aunque realizando
esfuerzos extras en las rectas que presentaba el circuito y aunque fuesen
cuesta arriba, ganábamos por ser en línea
recta. Anvi tenía ganas de correr, pero yo no daba más y le dije que tirase
sólo a meta que ya le tocaba al gran David.
A David hay que pararle los pies, porque tiene una
fuerza que te lleva aunque sea “arrastras”.
Hicimos unos kilómetros muy buenos bajando incluso de 3:50, pero al llegar a
Miguelturra volvimos a tener problemas con las calles y en uno de esos vaivenes
caí a plomo al torcer una calle con pendiente y mi maltrecha pierna se quejó
bastante. Después se nos cayó la botella de agua y tuvimos que dar un puntito
más de positividad.
Empiezan las cuestas allá por el kilómetro 18 y
empezamos a remontar y a adelantar a todos los que nos pasaron en el pueblo y
el gran David se vino arriba y ya me sacó todo lo que pudo. Muy fuertes íbamos
hasta que a 700 m. de la llegada volvieron los problemas, nos metimos por el
desvió del maratón, dimos la vuelta frenando en seco y metí el pie en una boca
de riego, alcantarilla o qué sé
yo. La llegada al estadio se me hizo eterna con tantos zig-zag y teniendo
para colmo que subir un escalón antes de entrar en la pista.
Llegué mareado y el tiempo no reflejaba la carrera que
habíamos hecho. Aún así hicimos récord de España bajando en dos segundos la
marca anterior.
Después vino lo mejor, unas buenas migas manchegas con
su huevo frito, revuelto cazurro y unas buenas palmeras de chocolate para rematar.
Ricardo de Pedraza
Enorabuena Ricardo por la carrera y por el esfuerzo que hiciste,como dices tu,esto no es nada fácil,pero hay que seguir luchando y entrenando...Valencia nos espera...también darte la enorabuena por esa crónica tan bien resumida,en resumen,eres un ejemplo a seguir y me quedaría sin palabras de ttantas cosas buenas....bueno y sabes qye aquí me tienes para lo que quieras,no dudes en llamarme....un saludo de,tu gran amigo " COLETA"
ResponderEliminarUna gran crónica de Ricardo de Pedraza. Yo como guía suyo tengo que aprender mucho todavía, solo ha sido nuestra tercera carrera juntos y parece que los resultados van llegando aunque no sea al nivel que nosostros esperábamos. Dice Ricardo que aun está muy verde en estas distantancias tan largas, así que imaginaros como estamos los nuevos guías el Coleta y yo: verdes, verdísimos. Pero esto solo puede tener una lectura, además muy positiva: todo lo que queda por delante es para mejorar día tras día. No hay que olvidar que el verdadero objetivo es el maratón de Valencia y ahí es donde tenemos que darlo todo. Al final sacaremos conclusiones.
ResponderEliminarPor cierto esperamos la crónica de los compañeros que corrieron en el Carpio.
Felicidades a Ricardo por la marca conseguida a pesar de los inconvenientes y de los incidentes de la carrera. Gracias por tu crónica que nos anima a seguir formando parte de este grupo RUNNERS AD SAN MIGUEL.
ResponderEliminarFelicidades a los guías, por su labor, ya que creo que debe ser complicado mantener el ritmo a la vez que estar pendiente de las irregularidades del terreno, las dificultades del recorrido y la impaciencia de algunos viandantes que deciden cruzar la calle justo cuando llegas a su altura.
Felicidades a los tres por ese Record de España que estoy seguro vais a volver a rebajar con poco que mejoren las circunstancias de la carrera en otra ocasión.
Felicidades por esa crónica de la carrera que nos demuestra que estamos en un gran grupo humano, el de los RUNNERS AD SAN MIGUEL.
Ahora a Valencia, una ciudad y un recorrido que se prestan para hacer una buena marca. A por el record en la Maratón. Ánimo
Un slaudo
Juanjo
Muchísimas gracias por la crónica Ricardo, transmite mucho más de lo que tú mismos puedes pensar. Enhorabuena a los tres, a Ricardo por su esfuerzo, valentía y valor con el que se enfrenta a todas las dificultades y a sus guías por su generosidad y entrega, los tres sois un gran ejemplo.
ResponderEliminarMucho ánimo con todo y mucha suerte en vuestra próxima aventura. Gracias a los tres
Enhorabuena a Ricardo por su gran carrera, su Record de España y su espíritu de entrega y enhorabuena también a sus dos estupendos guías, Anvi y David. Acabáis de formar un grandísimo equipo que seguramente nos dará muchísimas más alegrías. Muchas gracias de todo corazón a los tres por hacernos amar aún más este deporte.También Felicidades Ricardo por tu crónica, hecha con mucho sentimiento y cariño y que refleja muy bien todas vuestras sensaciones en la carrera y los prolegómenos de esta. De verdad que se me han erizado los pelos.
ResponderEliminarUn abrazo a los tres,
Aupa Runners San Miguel
Muchísimas felicidades por la gran carrera que hiciste Ricardo, y a estos dos guias, que decir de ellos , que todos nos sentimos muy orgullosos de ser sus amigos y sobre todo.COMPAÑEROS:
ResponderEliminar